Los niños de una escuela se quedan sin gallinero por las quejas de los vecinos
Poco les ha durado la experiencia a los alumnos de una escuela que aprendían a cuidar de varias aves de corral. Los vecinos se quejaron del ruido ocasionado por las aves y han suspendido el proyecto.
El proyecto nacía como una iniciativa educativa para que los niños de una escuela francesa aprendieran de primera mano cómo cuidar de un pequeño corral de gallinas. Los pequeños estaban encantados con la experiencia. Los responsables de la escuela Saint-Michel, en la ciudad de Saint-Etienne habían emprendido un experimento educativo en el que distribuían responsabilidades entre sus alumnos para el mantenimiento y cuidado del gallinero.
¿Demasiado ruido por el canto de las aves?
Pero la alegría de los niños les ha durado poco. El pasado 7 de octubre el proyecto fue suspendido, y las gallinas y los pollos que habían nacido en las instalaciones escolares, que maravillaron a los pequeños, tuvieron que ser trasladador al campo. Los vecinos del barrio denunciaron que los cacareos, cloqueos y cantos de las aves les molestaban.
Algo incomprensible para los docentes y el voluntariado que organizaba el experimento, sobre todo en un barrio atestado de tráfico, con una notable contaminación acústica derivada de los vehículos o los locales de ocio nocturno.
