Cazar el reclamo en enero es igual que si quisieran prohibir la caza en berrea del ciervo y se consiguiera salvarla pudiendo cazar en julio
Luis Fernando Villanueva, presidente de Aproca España, ha comentado que, ante la noticia dada por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, no cabe sino la prudencia y pensar que lo que se ha conseguido era lo mínimo que el sector merecía.
Para éste, la reflexión debe hacerse cuando la decisión de la UE se ha conseguido a costa de que Andalucía y Castilla-La Mancha hayan tenido que variar sus periodos de veda, reduciéndolos en siete días, lo que supone quitar a esta modalidad prácticamente un 50 por ciento de los ingresos que se habían obtenido en temporadas anteriores.
Según Aproca España, los cazadores de perdiz con reclamo están eligiendo otras Comunidades Autónomas para la caza de reclamo, ya que, en buena parte en Andalucía y Castilla-La Mancha, los días hábiles de caza no sirven en su mayoría para ejercer esta modalidad.
Para Villanueva, cazar el reclamo en enero es igual que si quisieran prohibir la caza en berrea del ciervo y se consiguiera salvarla pudiendo cazar en julio.
Aproca España ha recordado que este problema viene precedido por la Directiva marco de Conservación de las Aves que prohíbe su caza en periodos de celo, a raíz de las denuncias de grupos ecologistas que han sido las que han propiciado que la UE instara al Estado Español a modificar algunos periodos de caza.
Según el ORNIS, la puesta de la perdiz se produce cuando han transcurrido cuarenta días desde el inicio del celo, por lo tanto el último día de caza de perdiz con reclamo debe de ser cuarenta días antes de las primeras puestas.
El gran debate, según Villanueva, está en saber qué se entiende por primeras puestas, y mientras que Andalucía tiene diferentes periodos en función de altitudes, para Castilla-La Mancha toda la región es igual y se ha tomado el primer huevo de perdiz de la región como elemento que ha permitido la reducción de días, una decisión que, ha considerado,
«muy grave y que afectará al futuro de esta modalidad».
Además, según ha denunciado Aproca España, existía otro estudio de la Universidad de Lleida que no se ha querido utilizar y que hubiera permitido salvar no sólo la modalidad, sino también los días de caza que había hasta la fecha.
Por todo ello, APROCA ha entendido que todo el sector cinegético debe saber que esta modalidad, de gran arraigo social,
«ha sufrido un importantísimo paso atrás, gracias, nuevamente, a la ayudas de grupos ecologistas que no han diferenciado el celo de aves migratorias, de aves como la perdiz roja, cuya densidad en España va mucho más allá de su caza en el celo».
Además, Aproca ha pedido responsabilidad a todas las asociaciones y que reflexiones sobre si se ha
«salvado esta modalidad porque han tenido que quitar días que coincidían con el celo… ¿quién dice que el siguiente caso no será la prohibición de caza de otras especies tales como el ciervo, corzo…?».
