Se proponen acciones para frenar la disminución de la población de la perdiz roja salvaje en Navarra
El Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra ha realizado un estudio técnico sobre la situación de la población de la perdiz roja salvaje en la Comunidad foral con el fin de establecer las causas de su disminución desde mediados de los años 90 y proponer las acciones necesarias para frenar este crecimiento negativo y que está previsto que se desarrollen en consenso con entidades locales, agricultores y asociaciones de cazadores.
La caza se contempla como una variable decisoria en la viabilidad de la población de perdiz roja
Caza y preservación de la perdiz
La caza se contempla como una variable decisoria en la viabilidad de la población de perdiz roja. Durante el estudio se ha observado que la presión cinegética ejercida a lo largo del tiempo se ha mantenido razonablemente equilibrada respecto a la abundancia de perdices existentes antes de la apertura de la veda, con ciertos altibajos. Es decir, la presión cinegética se va ajustando a la disponibilidad del recurso, lo que pone de manifiesto la bondad del modelo de gestión cinegética que se aplica en la Comunidad Foral. El Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente subraya la importancia de aplicar las medidas necesarias para continuar con el ajuste cada año de la presión de caza a la situación de las poblaciones, teniendo en cuenta que actualmente el margen es muy pequeño y que hay que mantenerse dentro de la extrema prudencia. A finales de julio y antes del cierre de los calendarios de caza de perdiz que preparan anualmente las asociaciones locales de cazadores, Desarrollo Rural propuso a la Federación Navarra de Caza y a la Asociación de Cazadores de Navarra (Adecana), un escenario restrictivo de caza de perdiz acorde con las poblaciones de esta especie detectadas en 2010 y que se basaba en limitar la caza de la perdiz en cada acotado a dos o tres días como máximo. Si bien inicialmente ambas organizaciones aceptaron la propuesta, posteriormente solicitaron una moratoria que el Departamento aceptó y transformó la limitación inicialmente prevista en una comunicación a los acotados sobre la débil población de perdiz existente y la importancia de establecer unos calendarios de caza ajustados el recurso. Por otro lado, el Departamento ha transmitido el resultado de los últimos estudios realizados sobre la perdiz en la sesión de 25 de octubre de la Comisión Asesora de Caza. Además, se transmitió a los cazadores las líneas de trabajo previstas y la petición, una vez más, de su colaboración, ya que todavía se está a tiempo de no perder a la perdiz salvaje como uno de los principales valores cinegéticos de Navarra.