Un enorme jabalí da un revolcón a un kangal turco cuando trataba de atraparlo
El macho, de más de 100 kilos, arremete con el único de los tres perros pastores que se atreve a aproximarse a él. La llegada de otro kangal evita que su compañero sea acuchillado mientras está tendido en el suelo.
Este es el día a día de los kangales turcos en tierra de lobos, grandes jabalíes y ante peligrosísimas hienas. Los perros pastores se enfrentan a los depredadores para evitar que maten a los animales que protegen. En la mayoría de las ocasiones, la fuerza del grupo decanta la victoria del lado de los canes, en cambio cuando se encuentran en minoría, sobre todo en enfrentamientos con manadas de lobos, tratar de proteger al ganado les cuesta la vida.
Un enorme jabalí se enfrenta a tres kangales turcos
Los perros pastores detectan la presencia de un cochino oculto en la vegetación al paso del ganado. Su reacción es interponerse entre el rebaño y el jabalí. El navajero, a pesar de enfrentarse a tres oponentes, no huye del lugar. Todo lo contrario, arremete contra uno de los perros que se aproxima demasiado. Mientras, los otros dos kangales observan la situación junto al pastor en la distancia. Resulta sorprendente la facilidad con la que el cochino derriba a un perro que puede llegar a alcanzar los 60 kilos de peso.
Tampoco muestra temor alguno a sus potentes mandíbulas, con una potencia de mordida de 743 PSI. Cuando el can está el suelo, el jabalí se enseña con él. La rápida reacción de otro kangal al ver a congénere caído evita la tragedia.
Alba Ruiz Flores
