El soñado cierre de la temporada de caza: abaten dos jabalíes medallables en una batida en una finca abierta
La medición en frío de los trofeos de los dos machos les otorga una puntuación que los posiciona como merecedores de medalla de oro y de plata respectivamente.
Los navajeros han sido abatidos en una cacería organizada por la Colla de Arén en los terrenos que gestionan en la Sierra de Montsec, cordillera calcárea situada en las provincias de Lérida y Huesca. El grupo de cazadores oscense gestiona más de 100.000 hectáreas en el Prepirineo y Pirineo catalán y aragonés. Los cazadores sumaron en el año 2022 la friolera cifra de 1.914 jabalíes, mientras que en el 2021 la cifra ascendió a 1.326 cochinos capturados.
Los dos navajeros se encontraban en el mismo encame
Adrián Fernández, colaborador habitual de Club de Caza y administrador del grupo de Facebook especializado en la caza de jabalíes a la espera de nombre Aguardos, narra el abate de los dos espectaculares machos.
«En el último fin de semana de caza de la colla de Arén cazamos en la Sierra de Montsec. La mancha estaba compuesta por un monte duro donde suelen abatirse varios machos con boca todas las temporadas. A mitad de la cacería un compañero avisa que ha visto dos jabalíes de gran tamaño juntos que pretenden escapar de la batida. El cazador les dispara a pesar de la distancia para hacerlos cambiar de dirección. Logra su objetivo y provoca que los cochinos entren al puesto que ocupa Jordi acompañado de su hijo, Jordi Junior. El montero derriba uno de los dos ejemplares, mientras que el segundo continúa su camino. Lo abate Florentino en la postura contigua a la de Jordi.
El otro trofeo, medalla de plata, este de un viejo y experimentado ejemplar. Trofeo medalla de oro de uno de los jabalíes abatidos.
Al finalizar la cacería, fuimos toda la línea de puestos para ayudar a sacarlos del monte. Primero transportamos el cazado por Florentino, un gran macho con boca medalla de plata, y por último bajamos a sacar el de Jordi. Cuando llegamos al lugar del lance, todos nos sorprendimos al ver las defensas que tenía, con 9 centímetros de colmillo fuera y unas amoladeras impresionantes, merecedoras de una medalla de oro».
Impresionante colmillo de uno de los macarenos.
Bea Rosete
