Tres hermanas, y todas son rehaleras

Rocío, Triana y Candela han heredado la pasión por la caza de su padre y su abuelo, de los que recibe el nombre la rehala, los apodan el Tormenta. La rehala con sede en El Campillo, localidad de la provincia de Huelva está compuesta por podencos, paterninos y alanos españoles. Candela es la más activa en lo que a los cuidados de los perros se refiere, ya que es la única de las hermanas que vive en El Campillo, mientras que Rocío y Triana residen en otras ciudades por motivos laborales.

Esta última es una activa defensora de la caza. Ha organizado el 27 de abril el Evento Mujer Caracola que se celebrará en la localidad onubense de Nerva. El objetivo de la iniciativa es mostrar la total integración de la mujer en la caza y en el sector primario.

Rehaleras desde que tenían uso de razón

Triana actúa como portavoz de las hermanas: "En nuestra casa la caza es la actividad que ha creado un vínculo aún más fuerte si cabe entre los integrantes de mi familia. Desde muy pequeñas hemos vivido el mundo de la rehala. Mi padre nos ha inculcado desde que dimos nuestros primeros pasos su amor por los perros y el campo. Las tres comenzamos a ir de caza a los 7 u 8 años.

Yo personalmente viví a esa edad mi primer agarre en una cacería en El Campillo. La caza para nosotras no es sólo ir de montería. Es cuidar de los perros, la cría de nuevas generaciones, el esperar las horas que sean necesarias la vuelta de los perros en el lugar de la suelta, para nosotros los perros son parte de nuestra familia. Soy una enamorada de la rehala por el compañerismo que existe entre los rehaleros. Es el no quedarte sola en la candela esperando perros, porque hay otro compañero que te acompaña, es la risa con los amigos o el buenos días por la mañana. Nos sentimos orgullosas por lo que somos y de dónde venimos. Le pese a quien le pese seguiremos cazando hasta que el cuerpo nos aguante".

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