Un atún muere en la orilla de una playa y los bañistas lo hacen filetes
Pesca mar

Un atún muere en la orilla de una playa y los bañistas lo hacen filetes

El pasado miércoles por la mañana, un atún de gran tamaño fue divisado por los bañistas que disfrutaban de la playa de Veneziola, en la Manga del Mar Menor.


Un ejemplar de más de metro y medio de longitud de atún eligió una playa murciana para morir. El animal, moribundo, pudo ser grabado por los que disfrutaban de la arena y del mar hasta que acabó varado en la arena, arrastrado por las olas.

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Los bañistas se fueron sumando al fileteado del atún muerto.

El atún no tardó en ser fileteado

Los allí presentes no lo dudaron y sacaron el cuchillo para cortar las partes de mayor valor culinario del gran pez. El kilo de atún rojo puede alcanzar un precio de más de 60 euros. Esto bastó para que minutos después de tocar tierra los lomos y faldones hubieran sido extraídos.

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Riesgo sanitario de consumir carne de pescado muerto

El hecho de que el ejemplar hubiera muerto por causas desconocidas no detuvo a los bañistas. Lo más comentado en la orilla de la playa entre los testigos es que el atún había escapado de la piscifactoría de San Pedro del Pinatar.

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El atún, muerto y fileteado en una playa de la Manga del Mar Menor.

Siempre que ha sucedido algo similar, las autoridades advierten que el consumo puede ser perjudicial para el ser humano al existir la posibilidad de contener altos niveles de histamina y otros contaminantes. Esta histamina, en cantidades elevadas, deriva de un crecimiento de las bacterias responsables de su formación que se encuentran en el músculo del pescado.

Su efecto en nuestro organismo se revela a partir de una sintomatología como picores, dolor de cabeza, malestar, sofocos e inflamación de la cara y el cuello.

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Piscifactoría de atún rojo en San Pedro del Pinatar.

 

Atunes varados en la playa, algo más común de lo esperado en la zona

El verano de 2019 es recordado en la misma zona de La Manga por haber aparecido miles de estos peces en la playa. Un temporal durísimo de viento y lluvia destruyó las jaulas de cría de los atunes, arrastrándolas hacia la costa. El resultado fue la devastadora imagen que vemos a continuación.

 


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