Ecologistas en Acción pedía 2 años de prisión y 180.000 €, y la Justicia le absuelve
El juez ha absuelto al guarda de una finca que mató accidentalmente a un lince, atendiendo a las versiones de los agentes del Seprona, que en todo momento apoyaron la versión de que el disparo fue accidental.
La única acusación ha sido por parte de la asociación ecologista, ya que la fiscalía no ha acusado en ningún momento, indicativo de que no había caso desde el principio, y los ecologistas probablemente solo han querido conseguir los escasos titulares en la prensa que les ha regalado ese espacio.
La justicia ha puesto cordura al asunto
Ha quedado demostrado que el guarda de una finca de Retamoso de La Mancha confundió al lince con un zorro debido a varios factores, entre los que destacan que no había constancia de que en la finca donde trabaja el guarda hubiera existido nunca un lince. Además, la justicia ha considerado probado que el 22 de octubre de 2014, fecha en la que ocurrieron los hechos, a las siete y media de la tarde, el guarda, que estaba realizando acciones de control de predadores, se encontraba en una zona de alta y abundante maleza.
Demostrado que fue un accidente
E.E.P., siglas del acusado, vio un animal moverse entre la maleza —alta según se comprobó después—, creyó que era un zorro, apuntó y disparó. Cuando se acercó para retirar la pieza se dio cuenta de su error, era un lince radiomarcado y dio aviso al guarda mayor que a su vez notificó al Seprona lo ocurrido.
No habrá recurso, se acabó la pantomima
La justicia ha fallado que no hubo dolo y Ecologistas en Acción no recurrirá esta decisión, después de personarse como acusación particular en un caso que todo el mundo sabía desde el principio que no iba a llegar al lugar donde pretendían, que era una sentencia de cárcel y con una multa desproporcionada y fuera de toda lógica. No tiene sentido alguno querer convertir un accidente por imprudencia en un linchamiento.
