¡A pesar de algunos tramposos!

No en todos los lugares, pero en general en las zonas con tradición codornicera el cupo se está haciendo con relativa facilidad.


Muchos cazadores de la última hornada dudaban ya de la veracidad de las narraciones de nuestros mayores cuando contaban las perchas de antaño. Ahora serán también las protagonistas las torcaces pues las perchas están aseguradas a nada que los acotados los gestionen bien dejando pasar más días de una a otra tirada.

Es una maravilla la explosión demográfica de este pájaro. Muchos de ellos incluso pernoctan en las grandes urbes. Ver para creer.

Pero no todo es del agrado de los cazadores. Existe un cierto malestar con determinados aficionados –pocos— que utilizan artes prohibidas para hacerse con abultadas perchas. Son los mal llamados furtivos, más bien diría oportunistas sin consideración hacia sus compañeros que con su cándida y confiada escopeta llegan siempre tarde. Pero curiosamente este buen hombre que todo aficionado lleva dentro no puede reprimir siempre su admiración por estos tramposos.

Deduzco por consiguiente que la fama de estos personajes, la cultiva en cierto modo la tolerancia de muchos que podrían impedirla, la complacencia de los indiferentes, la admiración de los que se empeñan en ver virtudes que no existen, creando en el aficionado un complejo de inferioridad nacido de la negación de sus propios recursos como consecuencia del paso de estos oportunistas. En definitiva carnaza para esos que tanto les quieren y que pretenden acabar con la práctica de la caza con toda clase de mentiras y falsos testimonios.

De todas formas la pelea seguirá con más fuerza si cabe si el ministerio de Transición Ecológica cae en manos de Unidas Podemos. Y lo han dicho públicamente repetidas veces que pretenden acabar con la caza. Así como suena.

Cuando en todos los países del mundo se caza y España es un país con patrimonio faunístico tan importante que es necesario, como en otros muchos regular las poblaciones de los animales para que el medio no se vuelva irracional. Pero no creo que el PSOE, llegado el caso, ceda este ministerio tan importante porque saben bien que los cazadores tienen la capacidad para mover los cimientos políticos de este país si vienen mal dadas. Y eso amigos es poco menos que la espada de Damocles.

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