Quiebra técnica de la caza en Castilla y León

Demasiado fácil sería culpabilizar a Su Señoría. La cuestión actual no es tanto jurídica, pues hay cauces de sobra para resolverla, sino técnica.


Cuando las cosas se hacen mal, cuando se vienen haciendo reiteradamente mal, lo razonable y deseable es que pase esto. Lo de razonable lo entiende cualquiera y, si digo deseable, es porque puede ser el punto de inflexión que la caza precisa, en Castilla y León y en el resto de España. No lo olvidemos: esta quiebra técnica ha podido producirse en cualquier otra autonomía.

Cada coto es un mundo en lo social, en lo ecológico y en lo económico: en lo ambiental

Cada coto es un mundo en lo social, en lo ecológico y en lo económico: en lo ambiental. Por eso y por mandato legal se exige a cada coto su Proyecto o Plan Técnico de Ordenación Cinegética (POC). Dentro de los cotos de cualquier autonomía los hay excelentemente manejados y otros que son un desastre. Una misma suspensión de la caza para todos ellos, como la habida en Castilla y León, es por tanto injusta con los buenos.

Alguien debió defender una sentencia individualizada coto a coto, porque la Ley ordena su manejo uno a uno, y nunca puede ser justa una sentencia única: el arroz para todos. Alguien no alegó este caleidoscópico universo de los Mil y un cotos ante Su Señoría de forma suficientemente eficaz; pero era el deber de la Administración y de las múltiples cazandanguerías patrias el haberlo logrado. Este tipo de juicios son más técnicos que jurídicos y aquí han quebrado a un tiempo el derecho y la técnica.

Justificación

El galimatías en el que ha sido atrapada la JUSTICIA (y la escribo con mayúsculas) nace de perspectivas técnicamente inasumibles: quiebra de la perspectiva jurídica por lo anterior (coto a coto) y quiebra técnica de la ingeniería en cuanto concierne a censos, tasas de captura y presión de caza; en todo lo que concierne al cálculo estructural de los POC, a la ingeniería de la caza.

Objetivos

Demasiado fácil y gratuito sería denunciar estas cuestiones, sin plantear propuestas y soluciones alternativas eficaces. Comencemos por lo más evidente, por los censos cinegéticos, por lo que hay en cada coto. Amigo lector, lo siento, pero desde ahora esto será un rollo ingenieril; pero si de unidades manejo y de quiebra técnica hablamos, la tecnología del diseño y cálculo de las estructuras ambientales concernidas es imprescindible y, ni tengo la culpa de su complejidad, ni las cuestiones se solucionan fácilmente.

Esto no es creer o no creer, es saber o no saber

Esto no es creer o no creer, es saber o no saber. Desde aquí propondremos un nuevo modelo de censado que permite establecer a partir de los datos preexistentes de los POC, y de forma incuestionable y eficaz, cualquiera de los datos censales que Su Señoría en Castilla y León ha echado de menos, felizmente y con muy buen criterio, y que acabarán echando de menos otras señorías en otras autonomías. Cuando las barbas de tu vecino veas pelar.

Metodología

Censos tradicionales. Hoy es todavía una práctica técnica, usual y hasta predominante, el «censar» una especie en una fecha, para basar su ordenación sobre el censo físico instantáneo así obtenido. Esta práctica, obsoleta y costosísima, presenta serias limitaciones.

  • Técnicas. En medios de difícil censado y en especies muy difidentes o inconspicuas.
  • Naturales. Algunas especies (estrategas de la r, migratorias y erráticas) presentan censos instantáneos muy variables, dentro del año y entre años, por lo que su censo físico instantáneo varía según su fecha de ejecución.
  • Otras. Tras su ejecución, pueden afectar a estos censos múltiples causas de bajas poblacionales, ajenas a las capturas controladas o producidas por ellas.

Por tanto, esas prácticas usuales de censado solo son útiles en la ordenación de especies biológicas no sometidas a capturas (protegidas) o que sean a la vez conspicuas, estables numéricamente (estrategas de la K), sedentarias, y de inventariación, fácil, fiable y económica; apenas para algunos grandes mamíferos de desiertos, estepas y sabanas. En ocasiones pueden ser también útiles a efectos de la gestión día a día de algunas ordenaciones.

Deriva de resultados de captura. Para todos los demás casos, que son la mayoría, proponemos establecer los censos de ordenación cinegética mediante nuestra metodología de deriva de resultados de captura. Esta metodología innovadora es aplicable a especies para las que son difícilmente aplicables los censos tradicionales y en ocasiones como alternativa a estos. El censo así obtenido resulta ser.

  • Calculado, lo que evita sesgos personales, pues con los mismos datos se obtendrá siempre el mismo censo.
  • Económico, porque parte de datos de fácil y económica obtención, usualmente preexistentes.
  • Rápido, por no exigir plazo de ejecución alguno.
  • Factible en cualquier fecha del año.

En la teoría censal asociada a este modelo, no existe para una especie en un coto un solo censo de ordenación (el costosísimo y primitivo censo físico instantáneo), sino varios. Destaca sobre todos ellos el censo referencial base de ordenación.

Censo referencial base de ordenación. Para cada especie es el censo más probable en la próxima anualidad (primera del periodo de ordenación) en hipótesis de.

  • Fecha referencial. La de apertura de su temporada de captura principal en el caso de las sedentarias y migratorias criollas, o la de sus existencias medias durante la temporada principal de captura local en las migratorias y erráticas.
  • Ausencia de azares atípicos. Ya sean biológicos (supervivencia, reproducción, crecimiento, migración y erratismo), de captación (meteorológicos, técnicos…), de gestión (incidencias diversas «de obra»: errores, limitaciones, oportunidades, costes…), o derivados de errores, imprevisibles e imprevistos de proyecto.
  • Capturas previas. Ausencia, en principio, de capturas controladas, previas a la fecha referencial. Todo censo referencial base tiene la cualidad fundamental de no depender del modelo de caza seguido o a seguir, y sirve de base para calcular los demás censos de ordenación.

Se trata por tanto de un censo.

  • Referencial. Referido, no a la fecha de censado como los censos tradicionales sino a la fecha referencial de su especie, y establecido además con las hipótesis añadidas mencionadas. Este censo es la base referencial sobre la que se aplicarán las tasas de captura a efectos de calcular el número de piezas referenciales a capturar.
  • Promedio. Suele suceder que una anualidad no esté libre de azares. Basar las sucesivas anualidades del próximo periodo de ordenación en los datos aleatorios de una sola anualidad e instante, como se hace hoy con los censos tradicionales, es por tanto arriesgado. El censo referencial base es un censo promedio, derivado de datos obtenidos durante las últimas anualidades, y preferentemente durante todo el periodo de ordenación anterior.
  • Predictivo. El censo referencial base actual es el más probable en la próxima fecha referencial, si se cumplen las hipótesis establecidas. Azares por medio, la próxima anualidad será como sea, típica o no; pero a efectos de ordenación estamos obligados a considerar que será un año medio e igual al promedio de los anteriores.

Toma de datos

Para el cálculo del censo referencial base de ordenación es necesario disponer de los siguientes datos de cada coto; procedentes unos del POC de cada coto (si está bien diseñado y calculado) y el resto de las sucesivas memorias anuales previamente presentadas (datos que deben constar archivados en las respectivas administraciones públicas):

  • Factores censales. Datos locales propios de cada especie en cada una de sus temporadas de captación.
  • Promedio del número de piezas cobradas, por temporada y anualidad.
  • Tasa utilizable local actual. A determinar para cada coto.
  • Presión de captación actual. El dato principal en cada POC.

Cálculo de los censos de ordenación

El cálculo es complejo, pero puede informatizarse fácilmente para cada Orden de Vedas de cada Autonomía. No es este el lugar oportuno para desarrollar este cálculo. Para su conocimiento científico y técnico puede verse el libro Técnica y ecología en el manejo de los recursos naturales renovables publicado por la Universidad Politécnica de Madrid. Fundación Conde del Valle de Salazar. Escuela Técnica Superior de Ingenieros Montes.

Consideraciones finales

La quiebra técnica existe, pero su solución también. Solo hay que cambiar algunos de los datos contenidos hoy en los POC (que ya va siendo hora) y aprovechar adecuadamente las obligadas memorias anuales de resultados que existen ya en las respectivas administraciones autonómicas.

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