Podencos, teckels, fox y jagd terriers tras los conejos
Eduardo de Benito
Las principales razas utilizadas por el cazador español en sus salidas a los conejos son principalmente manetos y podencos, pero sin olvidar la aportación de otras razas como teckels y jagd terriers.
Los perros de muestra de pelo duro
Eduardo de Benito
Los grifones o perros de muestra de pelo duro corresponden a la necesidad de un perro de muestra de constitución física más potente que las de las razas británicas, que hacían furor en Europa a principios del siglo pasado. Se buscaba seleccionar perros que pudieran ser utilizados para cualquier tipo de caza, para lo que deberían poseer buen olfato, hablilidad para el rastreo tanto como para ventear por alto, y sobre todo una constitución física muy potente, que les permitiera trabajar en los cazaderos más difíciles, incluido en aguas heladas y turbulentas.
Razas valoradas, pero que no acaban de triunfar
Eduardo de Benito
Alguien con sentido del humor dijo que el perro es el único ser, incluyendo la esposa, que admira al hombre. Desde luego el perro tiene siempre de nosotros una idea muy superior a nuestros merecimientos; en el campo, cazando nos cree omnipotentes e infalibles. Por eso en el perro de caza sorprendemos una mirada de duda o desconcierto cuando fallamos el tiro y la pieza escapa, pero al final de la jornada también nos perdona.
El setter inglés y las becadas
Eduardo de Benito
El perro, importante en la caza menor en todo tipo de cazaderos, aún lo es más en el monte, donde nuestro compañero alcanza el grado de imprescindible. Aquí se extreman las dificultades cinegéticas, las posibilidades de escape de las piezas se multiplican, también las de mimetizarse con un entorno rico en colores, luces y sombras, como hace la becada, y la dificultad de movimiento de perros y cazadores es notoria, exigiendo de ambos una verdadera buena forma física.
Eduardo de Benito
En términos absolutos de agudeza olfativa la diferencia entre las razas de rastro británicas y las francesas son imperceptibles, operando en nuestra inclinación por unas u otras fundantentalnlente factores ambientales y antropológicos. El tipo y hábitat de las especies (cazadero) que pretendemos alcanzar y nuestros gustos personales son las únicas razones que deberían dar prioridad en la elección individual.
Eduardo de Benito
El final de la temporada de caza nos impone un nuevo reto cara a nuestro perro. Tomar las medidas oportunas para que los largos meses de inactividad que el animal tendrá que afrontar no representen una merma en sus cualidades cinegéticas. Y para conseguirlo debemos abordar el problema desde cuatro frentes: alimentación, salud, alojamiento y ejercicio.
Eduardo de Benito
Es el podenco el perro de caza más popular en España y razones no faltan para ello. Animal rústico, resistente a las enfermedades, frugal en su alimentación, y eficaz en la caza sobre todo tipo de piezas, lo que le convierte en la opción preferida para la caza en toda la zona sur y levantina de la Península.
El perdiguero de Burgos, un perro muy nuestro
Eduardo de Benito
Esta raza es la representación actual de lo que debe ser un buen perro de caza, plenamente integrado en el conjunto de las razas trotadoras, con un semigalope moderado. Muy bien adaptado a los cazaderos de Castilla, resistente, con una dureza de pies que llama la atención por su aguante, dosificando su trabajo sin alargarse y cazando para la escopeta.
Epagneul Bretón, un clásico en el cazadero
Eduardo de Benito
El epagneul bretón demuestra sus espléndidas cualidades tanto de perro de muestra como de colaborador, sin amedrentarle el trabajo en el agua. Virtudes que le han permitido ocupar uno de los primeros puestos en cuantas encuestas hemos hecho desde Federcaza entre los cazadores ¡Qué perro más completo y agradecido!
Deutsch drahthaar, pasión a tope
Eduardo de Benito
Es un perro apto para todas las especies, en cualquier clima y en todo tipo de cazadero. En llano para la codorniz veraniega o la brava perdiz, en el bosque para la becada o el faisán, en marismas y pantanos para las acuáticas o la agachadiza común, en la alta montaña para la perdiz pardilla y entre matorrales de monte bajo para la liebre y el conejo. Es ante todo un perro polivalente, uno de los animales más completos del mundo de los perros de caza.
Eduardo de Benito
Finalizada la temporada de caza, la escopeta al armero y el perro a la perrera, a descansar, y con ello cambiará de forma radical el estilo de vida de nuestro compañero cinegético. Como punto final de la temporada propongo un juego ligero, un divertimento similar a ese de cada oveja con su pareja, refrán que denota que cada cual se siente mejor cuando se halla entre los de su misma clase y me he puesto a hacer parejas.
El galgo y la liebre, un batallar de siglos
Eduardo de Benito
Ningún inglés vale tanto como un español, el galgo hispano es la respuesta ecológica a la liebre, pieza sobre cuya caza se ha articulado todo el desarrollo histórico de la raza, circunstancias que le han convertido en la mejor elección para cazar en aquellas topografías donde la llanura se impone.
Pointer y epagneul bretón para codorniz
Eduardo de Benito
No se puede cazar en verano sin buena nariz. El perro debe ser capaz de mantener todo su potencial olfativo cuando el calor es más abrumador, sobre un campo seco, en las condiciones más adversas, circunstancia que condiciona la caza de la codorniz.
Eduardo de Benito
Ya nadie pone en duda la necesidad de adiestrar a un perro de caza y que su educación ha calado hondo en el cazador con perro de muestra, siendo suficiente con acercarse a las revistas del sector y a los foros de Internet para ver el interés que el tema despierta.
Meditación ante las nuevas razas caninas autóctonas
Eduardo de Benito
Nuestros perros de caza autóctonos son parte fundamental de la cultura española y sin embargo cualquier intento de realizar una investigación sobre los mismos se encuentra con una insalvable dificultad, la falta casi absoluta de trabajos de mérito en los 80 primeros años del pasado siglo, ya sean de carácter parcial, descriptivo, analítico o interpretativo. Faltan estudios empíricos con detenimiento sobre aspectos sociológicos, funcionales, cinegéticos, históricos, tanto de alcance regional como nacional.