Burgos

El lobo ha vuelto a matar en Espinosa de los Monteros: un ternero devorado a 15 metros de las casas

Los lobos han matado y devorado un ternero a 15 metros del núcleo urbano. Club de Caza ha recibido las imágenes de dos lobos grabadas esta mañana por un vecino de un municipio situado a 60 kilómetros de lugar del último ataque.



En las imágenes grabadas esta mañana por un vecino del municipio cántabro de Reinosa, situado a 60 kilómetros de Espinosa de los Monteros, que un ganadero ha enviado a Club de Caza, podemos ver cómo dos lobos huyen por un prado al ser sorprendidos. Y a plena luz del día.

Los lobos matan a un ternero a 15 metros del centro urbano

El acoso de los lobos a los vecinos del municipio burgalés de Espinosa de los Monteros no tiene fin. Su última víctima, después de intentar matar a un cordero la noche del viernes 2 de abril, cuya muerte fue evitada por la irrupción de un vecino que lo sorprendió mientras lo tenía entre sus fauces, ha sido un ternero del ganadero José Miguel Sainz. Imágenes que fueron grabadas por una cámara colocada por el propietario del cordero al que había matado dos ovejas días antes en una parcela en el casco urbano.

¿No has visto el vídeo? Pulsa en la siguiente imagen para verlo:

El ganado estaba en una inspección veterinaria

Los lobos han matado y devorado en su totalidad el cuerpo del ternero aprovechando que las vacas, junto a los terneros, se encontraban en una parcela alambrada a 15 metros del centro del municipio. Esto era así debido a que se les tenía que realizar una inspección por parte de los veterinarios de la Junta de Castilla y León, saneamiento ganadero.

El ataque, que ha sido verificado por los agentes medio ambientales, tuvo lugar la noche del lunes 5 de abril.

 lobos matan ternero

Esto es lo que encontró el ganadero al llegar al lugar donde estaban sus vacas.

Solo han dejado la cabeza y la columna vertebral

El ganadero, al personarse como cada mañana para ver el estado en el que se encontraba el ganado, se percató del comportamiento anómalo de una de las vacas, que no tenía el ternero a su lado. Josemi es un experimentado ganadero que, por desgracia, ha sido víctima de los ataques de lobos verificados por los agentes medioambientales en varias ocasiones. Al ver todo esto, se temió lo peor.

El año pasado los lobos mataron cinco potros, dos novillas y un ternero. Y en lo que va de año es el segundo ternero que matan.

Así fue. Encontró en la parcela los restos del ternero del que sólo habían dejado la columna vertebral, la cabeza y las pezuñas.

 lobos matan ternero

Los lobos han devorado por completo al ternero.

Situación desesperada

El ganadero se está planteando abandonar lo que hasta ahora era su modo de vida ante los continuos ataques de los lobos. Además de perder a sus reses, no cobra indemnización alguna por parte de las administraciones al estar situado el municipio al norte de Duero. A esto hay que sumar la bajada de la rentabilidad de las explotaciones ganaderas debido a los bajos precios de venta y a los altos costes de producción.

No tienen derecho a cobrar indemnización alguna

Sin indemnizaciones, ya que la Junta se limita a pagar las franquicias de los seguros privados que han tenido que pagar de su bolsillo los ganaderos debido a que en esta demarcación el lobo está considerado especie cinegética y los responsables subsidiarios de los daños causados son los propietarios de los cotos de caza. Algo que no tiene sentido, ya que los cazadores son los responsables de su gestión a pesar de que la junta es la que impone los cupos.

Este ganadero nos confirma que la administración sólo se hace responsable de los daños ocasionados por las manadas procedentes de las reservas que gestiona.

Una situación insostenible

El ganadero, desesperado, muestra su malestar durante toda la entrevista realizada por Club de Caza, ya que los seguros sólo cubren los animales que estén provistos de microchip. Los lobos, en la mayoría de los casos, atacan a ganado o caballos con escasos días de vida o recién paridos, a los que no han podido aún registrar y, en el caso que lo hayan hecho, devoran en la mayoría de las ocasiones el chip identificador, haciendo imposible el cobro de la indemnización.

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