Caza al salto de jabalíes con podencos andaluces en la Sierra de Huétor
Un jabalí sorprende a dos cazadores granadinos cuando daban por finalizada, tras seis horas de duro esfuerzo, su jornada de caza. El espectacular trabajo de la revoca de podencos andaluces obligó al cochino a abandonar su lugar de ocultación y permitió su posterior recuperación tras ser herido por el disparo de uno de los podenqueros.
Los podencos andaluces procedentes del afijo Podenco Andaluz Artemisa muestran cada jornada de caza su polivalencia, tanto para la caza mayor como para la caza al salto de conejos, liebres o perdices o a la recuperación de piezas en la caza a puesto fijo. El podenco andaluz es una raza de perro de caza capaz de adaptarse a cualquier tipo de terreno y a todas las modalidades de caza.
Media vida criando podencos andaluces
Manuel, padre e hijo, son dos cazadores de la provincia de Granada que desde hace tres décadas viven un idilio con la raza de perro podenco andaluz. Hace diez años crearon su propio afijo con la línea de perros que ha surgido de un cuarto de siglo de selección de ejemplares y de duro trabajo en el campo. El objetivo de la familia de podenqueros es perpetuar y difundir la raza de perros originaria de Andalucía.
Un jabalí es levantado por los podencos andaluces de un lentisco
Padre e hijo ya se dirigían hacia el lugar de aparcamiento de su vehículo, tras dar por finalizada una mañana de caza en un coto de la sierra de Huétor Santillán, localidad situada en la parte nororiental de la comarca de la Vega de Granada, cuando sus tres podencos andaluces, de nombre Nieve, Enzo y Casia, detectaron la presencia de una pieza en el interior de un matorral.
En un primer momento pensaron que se trataba de una liebre. El objetivo de la jornada de caza era el abate de conejos y orejonas. El movimiento del jabalí en el interior del lentisco antes de tratar de huir permitió al cazador cambiar la munición. Pasados unos segundos el cochino irrumpió como una exhalación de la vegetación. A una velocidad tal que no permitió al cazador grabar el momento del lance al estar ajustando la cámara. A pesar de recibir el impacto en los pulmones el animal recorrió varios centenares de metros hasta ser parado por los podencos. Al llegar al lugar del agarre el cazador ya encontró al cochino sin vida rodeado de los podencos.
Si quieres disfrutar de lances tan espectaculares como este no dudes en visitar o suscribirte al canal de YouTube del cazador.
Para más información del afijo Podenco Andaluz Artemisa, ponte en contacto en el número de teléfono 665349902.
Javier Fernández
