Tres ciervas cocean a los depredadores que tratan de cazar a una de sus crías
Un grupo de venadas trata de evitar que tres coyotes acaben con la vida de un cervatillo en un campo de golf. Las naturaleza en ocasiones nos deja angustiosas imágenes como estas.
Por mucho que nos pese no debemos intervenir en el devenir del mundo natural. Muchos usuarios de Facebook han recriminado a los golfistas que se encontraban grabando las imágenes en el hoyo 9 que no intercedieran para salvar la vida del gabato. Pero por muy duro que nos parezca han procedido de la manera correcta.
La ley de la supervivencia impera en la naturaleza
Tres coyotes, especie de mamífero carnívoro de la familia Canidae que habita en América del Norte, América Central y América del Sur, desde Canadá hasta Colombia, han sorprendido a tres ciervas adultas y un cervato en el green de un campo de golf a plena luz del día.
Los depredadores tratan de dar caza al joven ejemplar pero no cuentan con la valentía de las tres hembras. Estas se enfrentan a los coyotes intentando alejarlos del cervatillo. Para ello no dudan en cocear a los cánidos. Los depredadores, a pesar de la diferencia de tamaño con los ungulados, no se amilanan en ningún momento. Un coyote mide entre 74 y 94 centímetros de longitud, sin la cola, y pesa de 8 a 16 kilos.
La estrategia de caza de los coyotes
Uno de los cánidos acosa a la cría mientras que sus congéneres están apostados en las inmediaciones del green para intentar evitar la huida de los ciervos. Su modo de caza consiste en alejar a los ejemplares adultos del cervatillo para darle muerte. Uno de los depredadores logra morder en el cuello de la presa en un instante que las hembras persiguen a uno de los cánidos.
Estas al oír chillar a la cría vuelven sobre sus pasos y patean al coyote para que libere al gabato. Desconocemos el desenlace de la escena de caza ya que el deportista finaliza la grabación antes de que los depredadores acaben con la vida del cervato o este logre huir junto a las ciervas adultas.
Antonio López Espada
