Un corzo fuera de serie, crónica de una caza muy trabajada
Una dura caza basada en una impecable estrategia llevó a este cazador a conseguir un trofeo de corzo que llevaba quitándole el sueño muchas noches.
Hace hoy dos años, el 20 de mayo de 2018, fue la primera vez que Cristian pudo ver al corzo que le quitaría el sueño durante las siguientes semanas.
Su primer encuentro
Fue en un sembrado, ya anocheciendo. Consiguió meterlo en la cruz del visor, pero la emoción y las prisas le llevaron a olvidarse del seguro del rifle. Cuando pudo desactivarlo, ya era tarde. El corzo había avanzado por un gran olivar y lo perdió de vista.
Esperanzador reencuentro
Desde ese día, el cazador no dejó de intentar localizarlo de nuevo en aquella zona. Pero no fue hasta que transcurrieron tres semanas que lo volvió a ver. «Estaba a 500 metros desde donde lo vi la primera vez, pero, en esta ocasión, en un pinar», nos dice Cristian.
En esta ocasión no le dio opción de intentar el acercamiento. Lejos de desanimarse, el cazador decidió volver al día siguiente para realizar una espera, pero solo consiguió ver a la hembra que iba con él. Cuando cayó la noche, el cazador, resignado, volvió a casa.
El lance definitivo
Pero llegó el gran día. El propio cazador nos lo narra: «Un viernes decidí recechar por el canto del pinar, y ahí lo encontré, a unos tres metros por dentro del pinar. Rápidamente me encaré el rifle, esta vez no podía fallar. Coloqué la cruceta del visor en el animal y apreté el disparador. El corzo cayó fulminado».
Un gran trofeo
Tras el disparo, el cazador se acercó y, a pesar de que sabía que se trataba de un gran trofeo, se sorprendió por lo impresionante que resultaba a primera vista. «Lo llevé a mi gran amigo y taxidermista, Julián Causapié, de Zaragoza, donde me lo hizo de pecho y lo puntuó. Estábamos hablando de un corzo con 822 gramos, pero le falló la densidad, como me aseguró el taxidermista, que me dijo que, de haber acompañado esta característica, estaríamos delante de un trofeo de más de 200 puntos. Finalmente, arrojó dio una puntuación de 184,65 puntos».
Equipo utilizado durante la caza
Este precioso animal fue abatido en un pueblo de Zaragoza y el arma utilizada fue un rifle Remington 710 en calibre .30-06, con una mira Pentaflex 3-10x50, un equipo, como lo describe el cazador «de lo más humilde, pero efectivo». La munición empleada fue Winchester Silvertip de 168 grains.
Categoría Caza Mayor
Esta crónica se posiciona como firme candidata a imponerse en la categoría Caza Mayor. Le deseamos mucha suerte a Cristian y le agradecemos enormemente su participación.
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Hasta el día 25
La fecha límite para recibir tus fotos y vídeos de caza será el próximo lunes día 25 de mayo. Tras esto, anunciaremos los ganadores del concurso en las distintas categorías.
