Caza de conejos con podencos y escopeta de calibre .410
Sevilla

Caza de conejos con podencos y escopeta de calibre .410

Acompañamos a cazadores sevillanos en una jornada de caza a conejos en olivares centenarios. Te mostramos el impresionante trabajo de los podencos andaluces para desalojarlos de las oquedades de los troncos y la pericia de los cazadores para abatirlos con escopetas del calibre .410.


En el caso de los conejos, resulta frecuente este tipo de lances en los olivares. Esto es debido a la ausencia de vegetación donde esconderse. Los conejos se ocultan en los múltiples huecos de los troncos o en la copa del olivo.

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El veterano cazador junto a uno de sus podencos andaluces y su paralela de pequeño calibre.

La caza al salto de conejos con podencos andaluces

Gerardo, veterano cazador sevillano con 60 años, comparte con los usuarios de Club de Caza sus más de cuatro décadas en la caza del conejo con podencos andaluces.

"Mis primeros pasos en la caza fueron cuando contaba con 20 años de edad. En aquella época los conejos eran abundantes entre las jaras, retamas y lentiscos de la Sierra Norte. Dada la gran cantidad de ellos que había, me aficioné a la caza de esta especie con podencos andaluces. A lo largo de mi vida cinegética, he tenido la suerte de cazar en las mejores fincas de la zona, cuando todavía había una importante población de conejos.

Por desgracia, estos han desaparecido prácticamente en la sierra debido a las enfermedades y a la proliferación de todo tipo de depredadores. Actualmente, cazo en la campiña sevillana, en un paisaje totalmente diferente. Olivos, palmas y rastrojos adornan los escenarios de mis jornadas de caza, lugares donde el conejo parece que se resiste a desaparecer".

La caza del conejo con el calibre 410

“Después de tantos años cazando con el calibre 12 he decidido cambiar el calibre del arma que utilizo para la caza, voy buscando más la calidad de los lances que la cantidad de piezas abatidas.

La escopeta que utilizo es una paralela marca Stinger del calibre .410 Magnum con munición de 19 gramos. Estoy enamorado de este calibre, pues al ser pequeño aumenta la dificultad del disparo y se disfruta mucho más de los lances. En fin, mientras yo pueda y Dios me dé fuerzas, seguiré practicando esta apasionante modalidad de caza".

El cazador quiere dedicar este reportaje a sus fieles compañeros de caza: Tula, Fauna, Tango, Milagro, Nelo y Ojeras.


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