Un fin de semana dedicado a aportar agua y alimento a la fauna silvestre afectada por un incendio

La sociedad de cazadores de Rocafort y Vilomara ha perdido el 80% de la superficie del área de caza que gestiona como consecuencia del incendio declarado hace 10 días en el municipio de El Pont de Vilomara. Los cazadores pese a no poder practicar la actividad cinegética en los terrenos quemados esta temporada se pusieron a trabajar para ayudar a los animales que han sobrevivido a las llamas, proporcionando agua y grano a la fauna salvaje, el mismo día que las autoridades les permitieron acceder a los terrenos calcinados.

Varios sociedades de cazadores se han visto afectadas por el fuego

El virulento incendio que se desató el domingo 17 de julio en el municipio barcelonés de El Pont de Vilomara ha arrasado 1700 hectáreas de las que 845 pertenecen a la Sociedad de Cazadores Rocafort y Vilomara, 215 a la Sociedad de Cazadores Sant Fruitós del Bages, 30 a los cazadores de la Sociedad de Cazadores ST. Vicente de Castellet y 15 a los miembros de la Sociedad de Cazadores de Navarcles. Los 55 integrantes del colectivo de cazadores de Rocafort y Vilomara han visto como las llamas consumían el 80% del acotado que llevaban cuidando con el mayor de los esmeros durante años. Pese a la impotencia y la tristeza que les ha supuesto ver devorada por el fuego la gestión realizada los cazadores han sacado fuerzas de flaqueza y todos a una acudieron ya el viernes por la tarde con cubas de agua a la parte del coto calcinada.

Ayudar a la fauna silvestre era prioritario

A lo largo del fin de semana han permanecido en los terrenos quemados facilitando agua y comida a los animales. A ninguno de los miembros de la sociedad les han pesado las altas temperaturas o el hecho de tener que volver de su lugar de vacaciones para ayudar a la fauna salvaje cuando más lo necesita. La Federación Catalana de Caza Territorial de Barcelona ha prometido ayudar a las sociedades damnificadas proporcionando bebederos y placas de coto.