Caza un jabalí medallable con la escopeta que le regaló su padre el día que se hizo cazador
Un cazador valenciano ha tenido que esperar 20 años para abatir su primer jabalí medallable. El sábado por fin logró cumplir su sueño en una apasionante espera. El jabalí estuvo más de 90 minutos en las proximidades del puesto antes dejarse ver.
El esperista cazó el jabalí que tantos años llevaba anhelando con la escopeta semiautomática de la marca Beretta que su padre le regaló hace veinte años, el día que obtuvo la licencia de caza y el permiso de armas.
El primer jabalí medallable de su vida después de dos décadas en la caza
Pascual Recatalá es un cazador de 34 años de la provincia de Castellón. Se inició en la caza hace dos décadas tras los conejos, perdices y liebres, pero hace cuatro años cambió está modalidad de caza por la espera al jabalí. Es un apasionado de la caza del jabalí en aguardo.
Este es el trofeo del jabalí, que ha conseguido la medalla de bronce.
El arma que utiliza es una escopeta semiautomática de la marca Beretta modelo 302 equipada con un visor holográfico. A lo largo de estos cuatro últimos años ha abatido varios cochinos, pero ninguno de ellos hasta ahora portaba en su boca un trofeo medallable. Hace dos meses vio en su zona habitual de caza las huellas y las marcas de los colmillos en los árboles de un gran jabalí.
El cazador nos muestra la medalla de bronce que ha obetnido el trofeo del jabalí.
Dos meses tras la pista del jabalí
En cinco ocasiones lo esperó en un claro del monte, pero hasta este sábado no logró verlo. En los dos primeros aguardos el macareno no compareció a la cita pese a que el cazador aguantó estoicamente durante 8 horas en ambas ocasiones la lluvia y el frío. En la tercera espera logró oírlo pero tras media hora en las cercanías del puesto desapareció.
El cuarto día de aguardo tampoco supo de él. Su suerte cambió este sábado. Pascual se ubicó en el lugar elegido, en un claro del monte, a las 20 horas. A media noche detectó la presencia del cochino gracias al vuelo de un mirlo asustado por el jabalí al desplazarse.
Tuvo que esperar inmóvil más de 90 minutos. Este fue el tiempo que el solitario tardó en decidirse a irrumpir en la zona descubierta de vegetación. A la 1:30 horas vio por fin su silueta. Lo abatió de un certero disparo de escopeta detrás de la oreja a 25 metros de distancia. El ejemplar pesó 70 kilos y portaba en su boca unas largas y gruesas navajas que le han hecho merecedor de la medalla de bronce.
Caza del jabalí en espera y con escopeta
Un lance ante un gran jabalí: con escopeta y en su primera temporada
El competidor de pesca de altura a nivel mundial Omar Vallés nos cuenta cómo consiguió abatir un jabalí medallable de 103 puntos en una montería en abierto, con una escopeta del calibre 12 y en su primera temporada en la caza mayor.
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Un joven cazador abate este espectacular jabalí con su escopeta
El gran animal, de unos 140 kilos, tiene además un trofeo con unos curiosos colmillos alunados. Su gran tamaño les lleva a que prácticamente se giren por completo.
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