Piden dos años y medio de prisión para un furtivo sin licencia de caza ni permiso de armas que huyó de los Agentes Rurales
El acusado huyó al ser interceptado por los Agentes Rurales. Carecía de permiso de armas, la escopeta estaba a nombre de su mujer, no tenía licencia de caza y abatió especies protegidas.
Los hechos ocurrieron solo tres semanas después del doble crimen de Aspa, donde otro furtivo disparó y mató a dos Agentes en 2017, y donde la Federación Catalana de Caza y la ONC se personaron como acusación particular, pero han sido juzgados la pasada semana.
Se enfrenta a pena de cárcel
La Fiscalía ha solicitado dos años y medio de prisión para un furtivo que huyó de los Agentes Rurales de Lérida tras ser interceptado el 16 de febrero de 2017 en un área privada de caza en Granyena de les Garrigues.
Los Agentes realizaban una inspección durante la prórroga de la caza del tordo. Cuando se acercaron al acusado, se encontraba junto a su mujer e intentó ocultar la escopeta y los zorzales y otras especies abatidas.
Corrió dejando atrás la escopeta, 4 zorzales, 2 aves protegidas y a su mujer
Cuando procedían a identificarle, salió a la fuga, pero los Agentes pudieron hacerle una foto antes de esto, lo que facilitó que los Mossos dEsquadra pudieran identificarle. Cuando esto se produjo, se comprobó que no disponía de licencia de armas, y que su mujer era la titular de la escopeta utilizada.
Los rurales encontraron la escopeta escondida entre unos olivos, así como cuatro zorzales y dos aves de especies protegidas
La mujer pagará una multa
Se le imputan tres delitos, dos contra fauna y flora, pero también otro por tenencia ilícita de armas, debido a que la escopeta que portaba estaba a nombre de su mujer. Esta también ha sido juzgada y pagará una multa de 1.440 euros por aceptar los cargos de dos delitos contra flora y fauna.
En cambio, el principal acusado no se presentó al juicio el pasado jueves, por lo que la vista fue suspendida.
