200 investigados en España por tráfico ilegal de especies
La operación se engloba dentro de una investigación que se coronó con la detención e investigación de más de 200 personas por tráfico de especies exóticas.
Agentes del Seprona de Badajoz desenmascararon un supuesto zoológico clandestino en Villabranca de los Barros que se proveía del comercio ilegal de animales. La operación se enmarca dentro de la conocida como Celacanto, una operación nacional que combate el tráfico ilegal de especies protegidas.
Una operación nacional con acusados de siete ciudades
Se han instruido diligencias penales a siete ciudades de Badajoz, Sevilla, Córdoba, Málaga, Valencia, Zamora y Caparica (Portugal), como presuntos autores de un delito de tráfico ilegal de especies protegidas y relación comercial con el propietario del zoológico.
Una operación que investiga y detiene a 203 personas
La investigación empezó en febrero cuando la Guardia Civil descubrió en Villafranca de los Barrios unas instalaciones con más de un centenar de animales de distintas especies y provenientes de todo el mundo.
En total, se detuvieron o investigaron a más de 200 personas por tráfico de especies exóticas. Agentes de la Guardia Civil recuperaron colmillos de marfil, caparazones de tortuga carey y pieles de lince boreal, entre otros.
#SEPRONA Guardia Civil detiene/investiga a 203 personas y aprehende más de 2.000 animales protegidos. Hay colmillos de marfil de elefante africano, caparazones de tortuga carey o pieles de lince boreal y de ocelote#Recuerda
— Guardia Civil ?? (@guardiacivil) 10 de julio de 2019
Si tú no compras —> No vende —> No trafica —> No mata pic.twitter.com/LDOisqrPmT
La lucha contra el tráfico ilegal
La operación se desarrolló en tres fases: la primera se centró en luchar contra el tráfico de anguila europea, la segunda, contra el de reptiles y la tercera, contra las especies protegidas, con especial incidencia en el marfil y, por primera vez, se ha empleado el Carbono 14 para su datación.
Los agentes colaboraron con el Servicio de Sanidad Animal, el Servicio de Conservación de la Naturaleza y Áreas Protegidas de la Dirección General de Medio Ambiente de la Junta de Extremadura.
Las instalaciones de Villafranca tenían a más de 100 animales con papeles falsificados. Además, todo estaba camuflado para que pareciese legal y el recinto carecía de la inscripción como núcleo zoológico, de los documentos sanitarios, y tampoco contaba con la autorización de apertura.
Los animales fueron inmovilizados y entre ellos se encontraban especies como el Puercoespín Africano, Grulla Coronada, Ñandú, Búho Real, Tortuga de Espolones Africana y Turaco Livingston.
