Un cazador malagueño nos cuenta la impotencia vivida ante nuevos casos de sarna

Últimamente estamos siendo muy conscientes de la problemática relacionada con la sarna que hay en el norte de la península, que está azotando principalmente a rebecos, ciervos y lobos, y de las quejas que tanto cazadores como no cazadores vierten contra la Administración a este respecto. Pero, aunque de manera más silenciada, la zona sur también está afectada por esta grave enfermedad y desde allí están llegando las primeras denuncias públicas.

Un vídeo viral

José Antonio Benal es un joven cazador malagueño que ha grabado el vídeo de un joven macho montés agonizando debido a la sarna. Este gran aficionado a la caza con arco nos ha contado cuál fue la sensación vivida al encontrar esta estampa tan dantesca cerca del coto que tiene en El Burgo, Málaga, que linda con la Reserva Andaluza de Caza, una parte de la reserva que no se caza en ninguna modalidad.

«No cazamos cabras pero intentamos cuidarlas»

Nos confirma que «domingo por la mañana, después de despertar en el coto y tirar unas flechas de entrenamiento fuimos a revisar los comederos que tenemos en el coto, pues aunque no cacemos cabras intentamos cuidarlas».

José Antonio nos ha contado que encontraron a este ejemplar mientras regresaban a la casa del coto, en un arroyo, una de las curvas en las que entra la Reserva Andaluza. «Le dije a mi padre, que me acompañaba, para el coche corriendo y bajé a ver que le pasaba. Cuando lo vi, lo primero que sentí fue muchísima rabia, hice el vídeo y lo único que salía de mi boca era insultos… Después de grabar el vídeo llegó mi padre y un compañero que estaba en el coche con nosotros, y yo me fui arroyo arriba llorando».

Frustración, impotencia

José Antonio compartía en sus redes sociales el vídeo que había grabado pocos minutos antes, para desahogarse de la frustración y la impotencia que genera encontrar un animal en tales condiciones, «la sarna ya le ha quitado las fuerzas, mucho ha tenido que sufrir para ya ni si quiera moverse, otra vida quitada por esta enfermedad que se ha vuelto algo normal para nosotros. De nada sirve que todos los años echemos comida, los cuidemos, son animales salvajes, va y vienen y si el resto no lo cuida, la sentencia ya la tienen dictada. La principal culpable, la Administración, que ni hizo ni hará nada, sólo cuando queden pocas echará la culpa a la caza abusiva, porque ellos con sus coches y sus trajes impolutos solo tienen un culpable, el cazador. […] Mientras tanto, sólo podemos denunciar la incompetencia, incapacidad y pasividad de la Administración», sentenciaba en su publicación.

Una enferdad infecciosa que en terrenos abiertos es más difícil controlar

«Llevo cazando allí desde que tengo memoria. Todos los años vemos alguna cabra con poca sarna, dos o tres, alguna vez un grupo con todas enfermas, pero nunca un caso tan grave.

»Este año sólo habíamos visto un machito como este, con el lomo lleno. La semana pasada contamos sesenta, todas limpias, pero es terreno abierto y, aunque nos gastemos mucho en comida, ellas viene de sierras como la del Chorro, o de la parte de Ronda, donde la sarna es un problema muy grande y tampoco se caza.

»Este joven macho estaba allí llegando a nuestro coto, habrá pasado seguro por nuestros comederos y habrá infectado… Personalmente siento mucha impotencia porque esto se tuvo que haber controlado antes, ahora creo que solucionarlo va a ser mucho más difícil. Tengo compañeros que trabajan en la Sierra del Chorro, donde está el Caminito del Rey, y allí muere todos los días así», nos comenta este joven, visiblemente afectado.