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Apenas se ve el cielo: un gran número de ánsares ocupan los campos de Doñana

La marisma del Guadalquivir se ha convertido, un invierno más, el espacio preferido por estos animales, que llegan hasta la Península tras viajar miles de kilómetros desde el norte de Europa.


 ánsares en Doñana
ánsares en Doñana

Una numerosa bandada de ánsares ocupa los campos de Doñana, en la Isla del Arroz (Isla Mayor). Las aves llegan hasta la marisma del Guadalquivir para quedarse cuando aparecen las bajas temperaturas. Aterrizaron en octubre y los campos están inundados de estos animales. Encuentran refugio y comida en los humedales. El ánsar común se concentra en grandes bandadas y come, habitualmente, una planta que crece en el agua: rizomas de la castañuela.

Una zona de cultivos de arroz: su hábitat favorito

Estos ánsares están en la Isla del Arroz de Doñana, conocida como Isla Mayor. Debe su nombre a que en la zona se cultivan algo más de 30.000 hectáreas de arroz. Su espectacular entorno natural hace que sea un lugar perfecto para el descanso de las aves en invierno y es que en esta zona, se han cuantificado más de 4.000 especies distintas.

Preciosas panorámicas al amanecer

Durante el amanecer, los ánsares regalan una panorámica preciosa: ingieren arena de las dunas para facilitar la digestión de los rizomas.

Aves migratorias del norte de Europa

El ánsar común es de gran tamaño y son animales que ocupan algunas zonas de la Península tras viajar miles de kilómetros desde el norte de Europa. Miden hasta 90 centímetros y son de color gris, con plumas de color crema y flancos más oscuros. Su cola es blanca, aunque tiene una franja oscura. Los machos son más grandes que las hembras y sus patas son cortas y fuertes.

Los ejemplares más jóvenes toman ejemplo de los más veteranos

Estos animales viven en casi toda Europa, así como en gran parte de Asia, en invierno migran al sur, y por eso llegan a España, para pasar el invierno en las marismas del Guadalquivir. Durante las migraciones, los ejemplares más jóvenes siguen el vuelo de los más veteranos para saber qué ruta deben seguir. Se alimentan de hierbas, pero también de raíces o plantas. Son animales que, generalmente, se emparejan de por vida y anidan en el suelo. Ponen de cuatro a seis huevos por año, de marzo a junio.

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