Bodeguera, cazadora y rehalera: mujer rural
Esta joven viticultura y cazadora catalana es un ejemplo de la sacrificada vida de la mujer rural. Para ella que no existen horarios y antepone el bienestar de su rehala y continuar con el proyecto familiar a las prioridades de cualquier chica de su edad.
En 1999, la familia Roca recuperó una plantación de viñedo de una hectárea de la variedad Cabernet Sauvignon. En los años sucesivos se ampliaron el número de vides hasta llegar a las siete hectáreas actuales. Las variedades son tempranillo, merlot, syrah, garnacha tinta, macabeo, garnacha Blanca y perellada.
Cazadora, rehalera y mujer rural
Ariadna Roca es una joven empresaria y rehalera de Conca Dellà, municipio perteneciente a la provincia de Lérida situado en la comarca del Pallars Jussá. La cazadora de veinte años ha heredado de su padre la pasión por la caza y por la producción de vinos.
La rehala de perros de Ariadna y Jordi cazan habitualmente con la Colla de Carreu, compuesta por 40 socios que gestionan 20.000 hectáreas en la provincia de Lérida. La colla fue fundada en el año 2004 por un grupo de amigos en el municipio leridano de Sant Romá de Abella, situado en la comarca de Pallars Jussá. Está dirigida actualmente por Ramón García junto a Mikel Pla, Mikel Colóm y Mark Mir.
El grupo de cazadores gestiona una gran extensión de terreno en el que sus 40 miembros, de los cuales 30 son cazadores a puesto y los otros 10 son rehaleros, pueden cazar en la modalidad de batida el jabalí, ciervo, gamo y corzo. El pequeño ungulado también es cazado a rececho.
La cazadora ostenta una rehala junto a su padre.
La rehalera caza su primer corzo medallable
La cazadora logró cumplir ayer su sueño de abatir un corzo con un notable trofeo al rececho. Ariadna tuvo que esperar hasta primeros de julio para cazar un animal de las características que buscaba. Hasta este último fin de semana sus quehaceres laborales y los estudios no le habían permitido ir de a la caza del corzo esta temporada. La rehalera hizo realidad este anhelo gracias a su padre, el también rehalero Jordi Roca. Ambos son propietarios de una rehala compuesta sobre todo por canes de la raza podenco paternino.
El perrero tenía localizado hace meses un ejemplar con un gran trofeo en un coto ubicado en el pre Pirineo de Lleida. La cazadora tras recorrer más de tres kilómetros localizó al ungulado junto a dos hembras en un prado. Necesitó de un único disparo de su rifle de la marca BSA del calibre 270 para hacerse con el macho que llevaba años anhelando. Ariadna y Jordi necesitaron de la ayuda de Goiat, un perro de la raza sabueso de Baviera para recuperar el corzo. La pieza yacía sin vida a 80 metros del lugar del impacto. El macho presenta una simétrica cuerna de seis puntas que nace de dos amplias rosetas adornadas de un grueso perlado.
Ariadna junto al precioso corzo abatido en un apasionante rececho.
Su padre caza un espectacular corzo multipuntas esta temporada en el pre Pirineo de Lleida
La peculiaridad de este trofeo es la disposición de sus siete candiles. Todos ellos nacen de dos anchas rosetas unidas entre sí. Las siete puntas que crecen a partir de los pivotes ubicados en la parte superior del cráneo están alineadas. Se trata de una cuerna con una conformación singular. Un trofeo prácticamente único.
Javier Fernández
