Nueva agresión al Medio Natural en general, y a la caza en particular

Desde hace unos años vengo observando un fenómeno que se está poniendo de moda y que nos viene de Europa. El hecho constatado es que los extranjeros, mayoritariamente franceses, ingleses y alemanes, vienen a jubilarse a nuestro país, y explico en qué condiciones. Esta observación está realizada en Cataluña y Comunidad Valenciana.


Compran un terreno, lo vallan o no. Algunos, sin ningún tipo de permiso municipal. Se dan casos de construcciones incluso en zonas LIC, PEIN u otro grado de protección. Son fincas aisladas, de valor ecológico, y la mayoría enclavadas dentro de áreas privadas de caza. Hay quien no necesita ni luz eléctrica, ni agua corriente, y viven a lo hippie. Lo primero que ponen son gatos y perros, y no tienen ningún control sobre su descendencia, por lo que es un problema añadido sobre ese espacio natural y su fauna. Periódicamente vuelven a su país de visita, dejando en algunos casos los animales abandonados a su suerte, llevándose los más queridos o jóvenes. Ahora se añaden los ciudadanos rumanos e hispanoamericanos que vienen a trabajar el campo y les resulta más económico vivir a las afueras del pueblo, incluso pueden mantener un pequeño huerto para su autoconsumo. El producto final es: fragmentación del territorio, proliferación de animales domésticos asilvestrados, discusiones constantes con los propietarios vecinos —por hurtos de cosecha, tierras, piedras, leña…—, con los paseantes al tener los perros sueltos, con los cazadores al deslindar su propiedad sin señalización con constantes trifulcas y denuncias, con los pescadores ribereños, con los Guardas de caza y Gestores, Agentes de Medio Ambiente, Alguaciles Municipales y con grupos ecologistas que tampoco ven con buenos ojos este fenómeno que en algunos casos no ayudan a la Naturaleza. En fin, seguimos empeñados en intervenir el medio natural a cualquier precio para nuestro beneficio sin reparar el daño que le causamos. Entretanto, hay quien se lamenta de que podamos cazar, nos lo quieren prohibir y son incapaces de cuidar y gestionar como lo hacemos desde los intereses propios conservadores de la caza. Alguien dijo: «Nadie cuida lo que no es de nadie». O, si no, vean cómo tenemos algunos Espacios Naturales Protegidos y tutelados por la administración.
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